lunes, 22 de marzo de 2010

2010 - Scorpions - Sting In The Tail


Lo cambia todo. Y claro que, incluso antes del anuncio, “Sting In The Tail” era un estreno esperadísimo. No podía ser de otra manera tratándose de este autor. Pero después de éste no se puede valorar como se haría en cualquier otro caso, ni como se hace con cualquier otra novedad. Y es que el anuncio de la retirada de los Scorpions condiciona cualquier valoración. Se alza con mayor importancia que la que pueda conseguir el nuevo disco, porque en este momento es cuando nos damos cuenta de que, sea como sea, la gloria ya la tenían ganada hace tiempo.

Sí, se puede tratar de comentar el disco comparándolo con lo que vienen haciendo estos últimos años (y en esa evolución se puede entender perfectamente) pero si se comienza a pensar en que tal anterior quizá tuvo más hits potenciales (de los últimos, “Unbreakable” los tuvo) o que quizá éste retoma ese sonido más moderno para conjugarlo, ahora en mayor medida, con el sonido de su etapa más exitosa (con guiños tan claros como el del inicio de “Sly”, que casi calca el de aquel “When The Smoke Is Going Down”) enseguida se nos ocurre que tampoco le podemos poner muchos peros a un trabajo que puede ser la despedida de unos tipos que tanto han hecho por este negocio.



Porque tampoco podemos caer en querer que se despidan con uno de sus mejores discos (aunque ellos mismos lo hayan anunciado así) y "sólo" deberíamos pedir que lo hagan con el mejor disco que los Scorpions pueden hacer a día de hoy, y eso sí que parece que lo han conseguido.

De la misma manera, habría que añadir que toda alabanza es poca para unos tipos que llevan tantos años (décadas) en esta música, pero que será siempre justa referida a su carrera, y no sólo a este disco. Porque que en esto hay tendencia a acumularlo todo en lo que se conserva más en el recuerdo o en lo que está más de actualidad.
Si, por poner un ejemplo emparentado, a AC/DC les ha llegado el momento de que se reconozca mediáticamente su carrera, sólo se puede decir que resulta de lo más justo por su labor, pero en ese cruce de cables comunicativo tan propio del que quiere alabar “por moda” o sin conocer a fondo de lo que habla, se ha acabado por hinchar la valía de su último disco, que ha centrado todos los comentarios, mientras que algunos de sus más logrados trabajos siguen en el olvido para el gran público.



Y que conste que “Sting In The Tail” merece las alabanzas (y no digo que “Black Ice no), que es un disco perfectamente homogéneo que parece pensado y repensado hasta dar con un listado de temas compensado en la variedad, que en ese aspecto sea probablemente “más disco” que esos dos anteriores con los que tan bien recuperaron el hilo, o que tiene temas que pueden acabar siendo himnos en el directo (lo veremos en la mastodóntica gira de despedida que se nos viene encima), pero tampoco se nos puede olvidar si queremos rendir el merecido homenaje a estos alemanes que tanto o más que éste han aportado otros muchos anteriores, y que de esos no sólo hay que mencionar a los que conservan la gran fama del grupo (si esto sigue generando noticias, seguro que vamos a volver a oír lo grande fue, por ejemplo, “Love At First Sting”) sino también a los que parecen más olvidados.



En ese sentido, parece justo pedir a los nuevos fans que se hayan dejado arrastrar por la marea que está empezando a generar el acontecimiento que rodea a “Sting In The Tail” (por otra parte, algo siempre positivo para enganchar a nueva gente) que no se queden sólo en comprar ese disco que está en la estantería de “actualidad” y que se interesen por buscar entre las “antigüedades” otros de los que difícilmente vamos a oír hablar estos días como “Fly To The Rainbow”, “In Trance” o “Taken By Force”. Quizá éste sí pueda ser el mejor homenaje que les podamos hacer (y por eso salpico esta reseña de vídeos de temas de aquellos tiempos), tratando de devolver a esa cima donde deberían estar a todas las maravillas que nos han dado durante tantos años. Podemos estar convencidos de que el que las descubra ahora las agradecerá.



A ellos, a los Scorpions, sólo darles las gracias. Por otro gran disco como es “Sting In The Tail”. Y por todo.

No hay comentarios: